Fronteras en América ... Parte 1

En un asado ayer celebrado en la casa de mi buen amigo Villa, estaba Manuel, quien estuvo trabajando un tiempo en Perú, en la ciudad de Cajamarca, en donde no hay nada, basicamente. Pero hablando así de la nada, se me dio hoy de ver qué onda y hacer realmente un viaje por todo lo que es sudamérica, si bien andube por un par de paises, creo que hay mucho por explorar y sobre todo cuando el presupuesto no es tan alto, sinceramente los precios, al lado de los europeos, son más que convenientes, así que por eso, empecé a ver un poco de qué se trataba esto.

Contra todos los pronósticos, arranqué con Bolivia y me crucé con la página www.turismobolivia.bo que funciona solamente con Internet Explorer muy a mi pesar, pero encontré gran variedad de información turística y bien organizada, cosa que no es común dentro de las páginas de turismo. De los muchos destinos propuestos que mencionan, están El Salar de Uyuni (foto a la derecha), que es una interminable desierto de sal en donde las nubes y el reflejo hacen casi imposible que las fotos no salgan buenas (Matt dixit)

Después existen ciudades que son casi coloniales, en donde el tiempo practicamente no pasó, como Potosí, que fue campo de batalla de San Martín. También del mismo rubro tenemos a Oruro, que aparte, tiene una fuerte influencia folklorica precolombina y hace que uno pueda toparse con bailes y fiestas que claramente no pertenecen a este siglo.

Finalmente, podemos encontrarnos con la parte boliviana del lago Titicaca (foto), que es el lago más grande del mundo y desde ya que podremos apreciar zona montañosa inmersa en un gran lago. La combinación montaña-lago es algo que siempre he apreciado y no dudo que esta no va a ser la excepción.

No llegué a investigar sobre las diferencias que uno puede encontrar entre la parte peruana y la parte boliviana, pero creo que se le puede dar una chance a ambas. Tampoco se que puede ofrecerme de diferente que la laguna de Chascomús, pero quiero creer que se van a poder hacer algunas excursiones que están dentro de las islas del Titicaca y comer algunas cosas típicas. (¡Llevar crema de bismuto por las dudas!)

Volviendo al viaje por Sudamérica, creo que en un viaje de 3 semanas, se puede llegar hasta Colombia (sin viajar en La Ponderosa) y de ahí volver. Para amazonas y Brasil, se necesitan unos cuantos días más, aparte los destinos nada que ver, son más playa y joda, o bien ¡rascarse la panza al sol tomando Brahma! Seguiré poniendo posts sobre Fronteras en América, ya que tengo algunas cosas más para contar.